Stories
Tin Tin tiene 9 años, creció en una zona muy pobre de Bogotá.
“Tin-Tin tiró de mi manga. Me volteé en la habitación llena de niños que celebraban y vi al niño de 9 años con una gran sonrisa y un billete de 5.000 pesos en el aire. “¡Jim esto es para la iglesia!".
Tin-Tin estaba muy contento de que él y su hermano hubieran ganado los dos primeros premios como mejores ahorradores en el Yes Club “Chocolatazos”. ¡Se había convertido en un incipiente emprendedor! Su asistencia semanal disminuyó cuando fue hospitalizado con neumonía y cuando regresó a las actividades del Club tuvo que hacerlo con un tanque de oxígeno. Luego los médicos diagnosticaron a Tin-Tin con fibrosis quística, pero incluso eso no impidió sus diligentes esfuerzos. Había aprendido a ahorrar dinero para su futuro. Tenía el apoyo constante de su hermano y su devoto padre, un hombre que, de niño vivió como un huérfano abandonado en las calles. En alguna parte de las lecciones sobre las provisiones de Dios, esta familia y especialmente Tin-Tin también aprendieron gratitud y generosidad. El Picho de Goma, producto estrella de los YES Club se vende por 1.000 pesos. ¡En junio, después de solo cuatro meses, Tin-Tin y su hermano habían ahorrado $135.000 pesos – de a mil pesos!! Yo pude ver el gozo en sus ojos.
Samantha, es una niña de 8 años con problemas de aprendizaje y vive en una zona muy pobre de Bogotá. Debido a las condiciones con las que nació, fue muy difícil para ella encajar o tener éxito en la escuela. Pero cuando se unió a uno de los Grupos de Emprendimiento y ahorro para niños de Construyendo Esperanza, descubrió su talento y pasión por la venta de productos comestibles. Rápidamente se levantó para ser la niña más exitosa en su Yes Club, produciendo y vendiendo fielmente 15 pinchos de goma cada semana. Su diligencia dio magníficos frutos ya que ahorro $100.000 pesos en solo 3 meses y medio. Con sus ahorros y aprovechando sus capacidades, ahora tiene la oportunidad de tener una vida profesional y favorable en la sociedad. Sus padres están encantados y felices de compartir su desarrollo y el impacto que el programa de emprendimiento y ahorro de la fundación ha cambiado sus vidas.
Isabel a llego a Bogotá con el corazón lleno de ilusiones por un mejor futuro. Las transiciones son raramente fáciles, son a menudo un sacrificio. Ella comenzó limpiando casas y trabajando en restaurantes e invernaderos. Durante todo este tiempo, ella y su esposo han conservado la esperanza de regresar un día a su lugar de origen. Isabel llego a ser parte de los grupos de ahorro de Investing Hope hace tres años. “Es sorprendente como puede uno ahorrar poco por poco”, afirma Isabel. Ella se enteró de la venta de un lote en su pueblo y comenzó a ahorrar para este sueño especifico. Después de ahorrar $2.000.000 pesos, ella compro el lote. Luego, ahorro $3.000.000 pesos y comenzó a construir la casa. Ya está casi terminada. “Poco a poco, estamos construyendo nuestra nueva casa. Un día vamos a construir nuestro propio negocio” nos comparte Isabel.
Isabel emana confianza cuando describe como ha logrado desarrollar compromiso, disciplina y buenos
hábitos de ahorro. Los miembros de su grupo han llegado a ser unos de los mejores ahorradores dentro de los programas de Investing Hope. Valeria, su hija de 8 años también participa en un grupo de
emprendimiento y ahorro para niños de los YES CLUBS. Ella es una trabajadora diligente y constante
como su mama. Investing Hope tiene un plan de alcanzar a mas madres e hijas. De una generación a
otra, vemos una gran ola de cambios positivos. Todas las donaciones nos ayudan a alcanzar nuestras metas.
“Una Joven Emprendedora Gana Dinero para Alcanzar Sus Sueños”
Laura, una joven bachiller de 18 años de edad vive en el barrio Paraíso como Daniel. Paraíso, al extremo sur de Bogotá, se puede ver en lo alto de las montañas con calles muy empinadas. Los sueños de Laura la llevan afuera de este lugar, ella quiere estudiar Lenguas Extranjeras en la universidad, pero no puede comenzar estos estudios hasta que haya ahorrado suficiente dinero para la pensión y los otros costos. Para alcanzar esta meta, ella comenzó a ahorrar dinero el año pasado y ya tiene una parte de lo que necesita. Laura sabe que está a un paso de conseguir sus sueños.
El año pasado, la mama de Laura la animo a ser parte del grupo de emprendimiento y ahorro, el cual, al igual que los YES CLUBS enseña responsabilidad financiera. Por primera vez en su vida, Laura ha venido ahorrando semanalmente y le gusta lo que el grupo ofrece: aprendizaje en la disciplina del ahorro y a la vez participar en un grupo que hace actividades que generan ingresos. ¡Todos los miembros del grupo se beneficencia!
Laura afirma, “Hacemos prestamos con intereses bajos y todos ganamos de los intereses; colaboramos todos en actividades sencillas de emprendimiento, pero se ven las ganancias y cuando uno se pone a sumar se genera mucha plata”. Ella compara este sistema de ahorro con el de tener una cuenta en un banco, “En el banco te cobran y no hay ganancias, en cambio aquí si se ven las ganancias”.
Al final del año pasado, Laura alcanzo a ahorrar $1.000.000 pesos. Los grupos de ahorro GEMA han
provisto a Laura una manera de ahorrar y aun aumentar sus ahorros. Ella sabe ahora que se pueden abrir otros caminos para ayudar a alcanzar sus sueños
Yaneth y su familia viven en las afueras de Bogotá junto con otros colombianos desplazados. Ellos han escapado la violencia política e injusticia económica, pero la vida es todavía muy precaria: pobreza rampante y la vivienda al lado de una montaña inestable.
Pero, ¿quién puede vivir sin esperanza? Yaneth y Antonio saben cómo enfrentar desafíos. Su hijo Javier tiene limitaciones físicas y cognitivas que requieren cuidado constante y muchos medicamentos. La amorosa dedicación de Yaneth es muestra de sacrificio. “El nunca esta solo; tomamos turnos para cuidarlo” afirma Yaneth. Son agradecidos con la provisión de medicamentos que el gobierno provee a pesar de todo el papeleo y las filas interminables.
Una puerta se abrió y Yaneth se hizo parte del grupo “Semillitas”, un grupo de ahorro de Investing Hope
para familias con niños con discapacidades. Yaneth hizo y vendió adornos de Navidad. Sus ahorros
comenzaron a crecer.
Antonio re empaca y vende diferentes clases de productos. Después de ver los ahorros de Yaneth en un año, Antonio decide ser parte del grupo de emprendimiento y comenzó a ahorrar el dinero que hubiera invertido en comprar tiquetes de lotería. Después de ahorrar por un año, ellos ya tienen el dinero para construir el segundo piso de su casa. Con espacio extra, la familia vive más cómodamente. Javier tiene su propio cuarto. Esta familia va en camino al éxito.